EL CAMBIO DE NOMBRE AL CENTRO CULTURAL KIRCHNER O CÓMO EL ODIO SE NUTRE DE LA IGNORANCIA
Carlos Ciappina
Octubre 12, 2024
El gobierno nacional continúa con su “batalla cultural” que pretende dar por tierra con “todo lo anterior” porque, todo lo anterior no sirve, habida cuenta que hay un profeta a cargo del Poder Ejecutivo nacional que posee las cuatro claves (destruir al Estado, enriquecer a los ricos, empobrecer a los pobres y liberar al mercado) que lo transforman en (sic) “soy el político más popular del mundo”.
En esa batalla cultural que busca consagrar al “presidente más popular del mundo”, el gobierno apela a una larga tradición argentina, en especial de las elites pero no sólo: cambiarle el nombre a los edificios, calles, aulas, obras arquitectónicas, escuelas, etc.
En este caso, la tristemente famosa motosierra – recordatorio de la obra destructiva anunciada y que está siendo llevada a cabo – posó sus miradas sobre el Centro Cultural Néstor Carlos Kirchner.
Puestos a elegir enemigos, los no muy valientes “libertarios” (irán siempre entre comillas para señalar lo inadecuado del término en relación a sus políticas) han elegido a un muerto. No cualquier muerto, claro, sino aquel cuyo apellido le da carnadura política a los primeros 25 años del siglo XXI. La figura de Néstor Carlos Kirchner crece con el tiempo para propios y extraños: reconstruyó durante su mandato la vapuleada democracia argentina y reconstituyó la economía de un país devastado. Y todo ello con apreciables convocatorias a todos/as los/as que quisieran colaborar en la tarea: radicales, socialistas, comunistas, independientes y hasta liberales fueron convocados por este peronista santacruceño. Su obra política le granjeó el respeto y la consideración de la mayoría del pueblo argentino.
Pero al gobierno “libertario” motosierrista nada de eso le resulta valioso y con la torpeza – y la determinación – que lo caracteriza, le ha cambiado el nombre de Néstor Carlos Kirchner por el de Domingo Faustino Sarmiento al Centro Cultural más relevante de América del Sur.
Y aquí viene la pregunta inevitable: ¿Javier Milei y su troupe se consideran sarmientinos? ¿En verdad creen que tienen algo que ver con la obra y trayectoria del sanjuanino? La respuesta es simple: no conocen la obra de Sarmiento y en su ignorancia buscan el apoyo en quien – seguramente – los hubiera defenestrado.
Vamos por partes….
Es cierto que don Sarmiento funda – como dijo sabiamente Jauretche – una de las zonceras argentinas mas perennes: civilización y barbarie. Europa y América. Ciudad y campo.
También es cierto que Sarmiento era un gran provocador: de boca bastante floja, sus expresiones contra los gauchos y contra los pueblos originarios han sido multiplicadas y señaladas – con razón – durante décadas como expresiones racistas y xenófobas repudiables. Hijo del cientificismo decimonónico se propuso construir Europa en América Latina. No lo logró, como nadie lo logrará.
Sin embargo, hay otros aspectos de Sarmiento que han quedado – bajo la disputa política de quienes se lo han apropiado o lo han defenestrado – ocultos o no del todo resaltados. Es en estos otros aspectos en que no hay ninguna conexión entre Sarmiento y los libertarios. Muy por el contrario.
Cuando Sarmiento asumió la gobernación de San Juan (1861-1864), sancionó la Ley Orgánica de Educación Pública que establecía la enseñanza primaria obligatoria y creaba escuelas públicas para los diferentes niveles de educación, entre ellas una con capacidad para mil alumnos, el Colegio Preparatorio y la escuela destinada a la formación de maestras.
Al llegar a la presidencia da la Nación (1868-1874) impulsó decididamente la educación primaria fundando unas 800 escuelas.
En 1875, Sarmiento asumió como Director General de Escuelas de la Provincia de Buenos Aires, sancionando la Ley de Educación común, gratuita y obligatoria para toda la provincia y creando los Consejos Escolares para dejar en manos de los/as vecinos/as elegidos por el voto la política educativa en los municipios.
Durante la presidencia de Julio Argentino Roca (1880-1886) se hizo cargo de la Superintendencia General de Escuelas del Consejo Nacional de Educación. Desde ese cargo impulsó – y logró – la sanción de la Ley 1420 que establecía para todo el territorio nacional la enseñanza primaria, gratuita, obligatoria, gradual, laica y para varones y niñas por igual.
¿Cuántas escuelas públicas ha creado, fundado o aunque más no sea reparado el gobierno “libertario” que se cree sarmientino?: 0 (cero).
A cambio de no crear nada, sí han propuesto privatizar por medio de vouchers la educación en sus varios niveles.
¿Cuántas Universidades Nacionales han creado, construido o reparado los gobernantes libertarios?: 0 (cero).
A cambio de no crear ninguna Universidad Pública, han intervenido la de Las Madres de Plaza de Mayo, han congelado los presupuestos universitarios y han vetado la ley que pretendía garantizar el funcionamiento de las Universidades Públicas argentina. Otra vez: 0 (cero).
Durante la presidencia de Sarmiento se extendieron 5.000 kilómetros de cables telegráficos y en 1874, antes de dejar la presidencia, inauguró la primera línea telegráfica con Europa. Modernizó el correo y se preocupó particularmente por la extensión de las líneas férreas.
El gobierno “libertario”, a contramano de Sarmiento, propone privatizar el Correo, dio de baja el Plan Conectar Igualdad e inició la destrucción de los Ferrocarriles Argentinos y Aerolíneas Argentinas. ¿Cuántos kilómetros de vías férreas crearon?: 0 (cero).
Con respecto a la tierra y su uso, Sarmiento fue un decidió opositor al latifundio y la elite terrateniente a la que identificaba con el atraso. Propuso y logró crear dos colonias de pequeños agricultores, los actuales Chivilcoy y Mercedes, convencido que en la pequeña producción agrícola estaba la clave de una economía más igualitaria. Al visitar Chivilcoy expresó: “he aquí el gaucho argentino de ayer, con casa en que vivir, con un pedazo de tierra para hacerle producir alimentos para su familia…”. Cuando intentó replicar esas experiencias de distribución de la tierra pública en pequeñas colonias se topó con la Sociedad Rural Argentina. La opinión de Sarmiento sobre la misma: “Nuestros hacendados no entienden jota del asunto, y prefieren hacerse un palacio en la Avenida Alvear que meterse en negocios que los llenarían de aflicciones. Quieren que el gobierno, quieren que nosotros que no tenemos una vaca, contribuyamos a duplicarles o triplicarles su fortuna a los Anchorena, a los Unzué, a los Pereyra, a los Luros, a los Duggans, a los Cano y los Leloir y a todos los millonarios que pasan su vida mirando cómo paren las vacas”.
Lejos, muy lejos de enfrentarse a los terratenientes, el actual gobierno “libertario” les subió la tasa de ganancia con una devaluación del peso brutal y les garantizó mejoras impositivas para la exportación junto a la reducción de los impuestos a los bienes personales.
En 1870, siendo presidente de la república, Sarmiento crea por ley las Bibliotecas Populares para estimular la lectura en los pueblos y barrios. Sarmiento las imaginó como una mezcla entre la iniciativa de la sociedad civil –los/as vecinos/as – y el apoyo del Estado Nacional otorgando subsidios para obras y bibliografía. Hoy hay 1017 Bibliotecas Populares en todo el país.
¿Cuántas Bibliotecas Populares o bibliotecas a secas han sido creadas por el gobierno “libertario”?: 0 (cero). Más aún, en vez de crear nuevas se ha presupuesto congelar los presupuestos de las existentes y reducir el personal –echarlo – de las bibliotecas como la Biblioteca Nacional.
Otro ámbito poco recorrido de la trayectoria de Sarmiento fue el de su pensamiento con respecto a las mujeres, su relevancia y su rol. Decididamente consideraba que las capacidades intelectuales eran iguales en mujeres y varones y por eso proponía la educación mixta en épocas en donde la mayoría de los países ni siquiera se preocupaban por enseñar a las mujeres la lectura y la escritura. Atendiendo al contexto de la época, la insistencia de Sarmiento porque las mujeres ganaran su propio sustento y adquirieran mayor libertad es notable.
¿Cuál ha sido el aporte “libertario” a la lucha por la igualdad de género?: 0 (cero). Y nuevamente, no sólo no han aportado nada sino que han destruido lo anterior, cerrando el Ministerio de las Mujeres y utilizando un discurso discriminador y profundamente machista.
Para cerrar esta nota diremos que, finalmente, Sarmiento dejo establecido en su testamento que quería que sus restos fueran envueltos en las banderas de Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay. Vocación americanista que no existe en el gobierno “libertario” actual, que hace gala de insultar a los hermanos de la América Latina (insultos a Venezuela, Bolivia, Chile, México y al Mercosur).
Por último, una frase del propio Sarmiento sobre el sentido de la política: “No deseé mejor que dejar por herencia millones en mejores condiciones intelectuales, tranquilizado nuestro país, aseguradas las instituciones y surcado de vías férreas el territorio, como cubierto de vapores los ríos, para que todos participen del festín de la vida, del que yo gocé sólo a hurtadillas”.
Nada más alejado del actual gobierno “libertario”, que se ha consagrado explícitamente a lograr que millones queden excluidos del festín de la vida.
Néstor Carlos Kirchner habita en un lugar que no necesita de edificios con su nombre, porque como Perón o Evita, está profundamente arraigado en el alma del pueblo y de allí nadie lo podrá borrar. Repitiendo los mismos errores de la Revolución Fusiladora, se intenta borrar la historia de todo un pueblo y su líder borrando su nombre. El nombre volverá una y otra vez en la memoria vital y en cada pared de la argentina.
El gobierno “libertario” – guiado por la torpeza política y la ignorancia – ha decidido cambiarle el nombre al Centro Cultural, pero el odio y la crueldad lo obnubila hasta tal punto que proponen para emparentarse a Domingo Faustino Sarmiento y al hacerlo no hacen más que mostrar su profunda ignorancia. Sarmiento, equivocado o no proponía la construcción de un país y una sociedad, el gobierno libertario solo propone la destrucción de lo que existe.
Para el sanjuanino, formarían parte con toda claridad de la verdadera barbarie.
Fuente Contraeditorial