CARLOS FUENTEALBA, PRESENTE!
La columna de Cultura de María Macaya
Abril 7, 2024
En diciembre de 2023 se colocó un cartel en el km. 1263 de la ruta 22 en la provincia de Neuquén en memoria del maestro Carlos Fuentealba, asesinado en ese mismo sitio durante la represión contra los docentes el 4 de abril de 2007. Fue uno de los 41 señalamientos que realizó la ex Secretaría de Derechos Humanos para plantar memoria y denunciar la violencia institucional.
En 2007 Jorge Sobisch era gobernador de Neuquén por tercera vez.
Recordemos que en los 90, durante el menemato, la provincia de Neuquén como tantas otras, sufrió la mayor precarización de los trabajadores y el desmantelamiento de la educación y la salud pública.
Ese 4 de abril los docentes neuquinos en huelga luego de tantos pedidos de audiencia, petitorios, pedidos de recomposición salarial, entre otras reinvindicaciones, decidieron en asamblea cortar la ruta a la altura de la localidad de Arroyito. Jorge Sobisch ordenó el inmediato desalojo de la ruta, y
como no podría ser de otro modo, claro, la policía desató una violenta represión.
Gases lacrimógenos, balas de goma, carros hidrantes. Parece mentira recordar tanta pesadilla que hoy se repite. Después de más de una década de haber conseguido tener una vida bastante organizada, como dijo Cristina, muchos y muchas nos preguntamos cómo hemos llegado a esto. Será una reflexión volcada en otra columna.
Carlos Fuentealba era un maestro de química y matemáticas que daba clases en el CPEM N° 69, del barrio Cuenca XV, Neuquén capital y delegado sindical.
Durante esa furiosa represión los docentes buscaron refugio en una estación de servicio. Luego de acuerdo entre dirigentes y policía los docentes comenzaron a retirarse hacia Senillosa escoltados por camionetas policiales.
Sin aviso y con total impunidad fue lanzada una granada de gas lacrimógeno que impactó en la luneta de un Fiat 147 y dio en la cabeza de Fuentealba, causándole hundimiento de cráneo. Luego de dos operaciones el maestro falleció al día siguiente.
El policía Darío Poblete, autor del disparo, fue condenado a prisión perpetua el 8 de julio de 2008 por la Cámara Criminal Primera de Neuquén, durante la causa Fuentealba I.
El 16 de marzo de 2023, en la Causa Fuentealba II, la cúpula policial también fue condenada. Fueron declarados culpables Benito Matus, como autor penalmente responsable del delito de abuso de armas agravado por haber sido cometido abusando de su función como miembro integrante de la fuerza policial; y Carlos Salazar, Moisés Soto, Adolfo Soto, Mario Rinzafri y Jorge Garrido, como autores penalmente responsables del delito de abuso de autoridad.
Volviendo al comienzo de esta columna, hace apenas un poco más de un año, cuando aún vivíamos en democracia y no sospechábamos quizás de que los Derechos Humanos estuvieran en discusión, en ese acto de homenaje al maestro Carlos Fuentealba, el entonces Secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, esto decía:
“Es de suma importancia el reconocimiento por parte del Estado de los hechos de violencia institucional para que no vuelvan a suceder, como también la contención integral a las familias de las víctimas. Esperamos que esta política pueda continuar más allá del sello político de los gobiernos, para que no tengamos retrocesos en esta materia”.
El retroceso que está sufriendo nuestra Patria es muy triste, no será fácil recuperar lo que se nos está quitando, pero no podemos abandonar la lucha.
Hebe, nos estará vigilando desde el cielo seguramente.

